A raíz del anuncio de Ecuador de exigir una visa humanitaria a los migrantes venezolanos, se puso en marcha un plan de contingencia en el que participan entidades del orden nacional, regional y local para atender a la población que, se prevé, podría represarse en el paso fronterizo del puente de Rumichaca, ante la imposibilidad de cumplir con los requisitos necesarios para obtener la visa y continuar su trayecto hacia el sur del continente.