Bogotá, (oct. 11 / 14). Con una inversión de 35 mil millones de pesos, de los cuales la Cancillería ha invertido el 15 por ciento, en 10 meses se han implementado, a través del Plan Fronteras para la Prosperidad, proyectos del sector de desarrollo económico que han beneficiado aproximadamente a 13.500 pequeños productores, campesinos, indígenas y afrodescendientes de diversas zonas fronterizas.
Gracias al trabajo conjunto con organismos internacionales, entidades gubernamentales, entidades sin ánimo de lucro, y empresas privadas, la Cancillería ha hecho realidad 22 proyectos del sector desarrollo económico de los programas de cadenas productivas, seguridad alimentaria, infraestructura productiva y turismo, llegando a 10 departamentos fronterizos.
Un ejemplo de ellos están en Nariño, a través del programa de cadena láctea, la Cancillería entregó 540 unidades de cantinas lecheras a 60 asociaciones del departamento. Este proyecto, beneficia a más de 4 mil productores de la región, genera alrededor de 900 mil litros para el consumo departamental y nacional.
En San Andrés y Providencia, en asocio con la FAO, se implementaron proyectos para la recuperación de prácticas y conocimiento para la producción de hortalizas y frutales. Actualmente funcionan más de 80 unidades productivas. En Providencia, también se adelanta la recuperación de la población de cangrejo negro, baluarte de la cultura raizal, este proyecto se ha adelantado con acompañamiento de las fundaciones Slowfood, Acua, Coralina, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA) y el Plan Fronteras para la Prosperidad
En el Catatumbo, se ha logrado la siembra de aproximadamente 15 mil hectáreas de cacao, mejorando la productividad a través de la rehabilitación de los cacaos envejecidos. Hacia el norte de Catatumbo se ha venido trabajando junto a la población indígena Bari en el mejoramiento de la seguridad alimentaria, especies menores, huertos productivos, y se han rescatado los valores culturales de esta población.
En Tumaco, para el 2015, se está construyendo la primera planta de procesamiento de chocolate. También se encuentran 100 hectáreas de espejos de aguas sembradas con camarón marino. Este proyecto ha beneficiado 120 familias afrodescendientes, la mayoría en condición de desplazamiento, y pretende llegar a 300 hectáreas sembradas con el fin de beneficiar a todos los productores.
En el departamento de la Guajira, el Plan Fronteras para la Prosperidad trabaja en unidades productivas integrales, mejoramiento de pozos profundos de captación de aguas subterráneas y la instalación de sistemas de riego por goteo para la producción de forrajes.
A su vez, en el corregimiento de San Felipe (Guainía), se están construyendo galpones para la producción de huevos, carne de pollo, jaulas para la producción de cachama, deshidratadores para la producción de concentrados con semillas del bosque amazónico, y por último, se construyó una sala de proceso para la producción de concentrados. De esta manera las familias indígenas y pobladores adquieren una fuente de economía propia aparte del comercio que depende de los países de Venezuela y Brasil.