Villa del Rosario (Norte de Santander), (feb. 6/15).  “Gracias por estos salones tan bonitos”. Con estas palabras, Cristina Ibarra, una menor que recorre con emoción los alrededores de las nuevas aulas del colegio Técnico María Inmaculada de Villa del Rosario en Norte de Santander, le expresó a la Canciller María Ángela Holguín lo importante que será esta construcción para su proceso de formación.

Cristina junto con otros 180 menores se beneficiarán en las próximas semanas de las tres aulas de clase y las baterías sanitarias que el Plan Fronteras para la Prosperidad de la Cancillería construye en este instituto educativo. 

Para la Ministra Holguín, la inversión que hace la Cancillería en este colegio se realiza pensando en la comunidad infantil.  “Lo que hemos querido es que estos niños puedan estar mucho más cómodos y que puedan recibir su educación en un lugar bonito... en un lugar que les hace la vida muy grata”.

También aseguró que pensar en el bienestar de los menores del país es comenzar a construir el camino de la paz. “La construcción de paz requiere de esto, requiere de mejores condiciones de vida en educación, en salud, en qué los niños y todos podamos tener unas mínimas condiciones que el Estado les dé para poder desarrollar su vida, su libertad, en general todo lo que quieren hacer. Entonces esto es parte de eso, de la construcción”.

Adicionalmente fue enfática en señalar que el esfuerzo que viene adelantando la Cancillería y el Gobierno Nacional por el bienestar de la población que habita en las fronteras es fruto del trabajo mancomunado con los actores locales y regionales. “Esto es una demostración muy clara de que unidos entre los Gobiernos locales, las comunidades y el Gobierno nacional podemos mejorarle la calidad de vida a la gente”.