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Intervención de la Ministra de Relaciones Exteriores de Colombia, Claudia Blum, en la Conferencia internacional de donantes para la respuesta a la migración venezolana

 

Honorables Ministros, Secretarios de Estado, altos representantes y delegados,

Deseo expresar la gratitud del Gobierno de Colombia por haber convocado esta Conferencia Internacional de Donantes.

América Latina afronta la segunda mayor migración forzada del mundo. La causa es clara: una crisis multidimensional en Venezuela que ha privado a millones de personas de un acceso adecuado a alimentos, atención sanitaria y a servicios básicos.

En el marco de la pandemia del COVID-19, esta situación es aún más angustiosa. Según la asociación médica Médicos Unidos de Venezuela, el sistema de vigilancia epidemiológica en Venezuela no es fiable desde 2014. Además, el 31% de los hospitales no tienen acceso al agua; y el 51% no tienen suministros médicos y de higiene básicos. Existe una creciente preocupación sobre las consecuencias de esta realidad para la región.

Desde 2015, más de 5 millones de venezolanos han huido de su país. Las agencias de la ONU estiman que, para finales de 2020, esta cifra ascenderá a 6,5 millones de personas, de las cuales 2,4 millones se establecerán en Colombia.

Actualmente, 1,8 millones de migrantes venezolanos viven en Colombia. Este es el mayor número de la región. Nuestro país los ha acogido con un espíritu de solidaridad.

Hoy en día, más de 370.000 niños venezolanos están matriculados en escuelas públicas colombianas. Nuestro sistema de salud ha proporcionado 5,4 millones de atenciones a 800.000 migrantes. Las entidades colombianas se enfrentan a grandes retos para proporcionar servicios sociales a esta población.

Sin embargo, mi país no puede cubrir por sí solo los gastos de asistencia al gran número de migrantes venezolanos, en particular en el marco de la emergencia del COVID-19.

Mi Gobierno ha dado alta prioridad a cuatro sectores que requieren una urgente cooperación internacional:
El primero es la salud, a fin de fortalecer el acceso de los migrantes a la seguridad social y a los servicios de atención en salud.

El segundo es la educación, para que nuestras escuelas absorban el aumento de la demanda de los niños migrantes.

En tercer lugar, se necesitan programas de transferencias monetarias de uso múltiple para apoyar el acceso a la vivienda y la alimentación.

Por último, la integración socioeconómica sigue siendo una prioridad para los migrantes que tienen la intención de permanecer en Colombia.

Excelencias, damas y caballeros,

Es esencial adoptar un enfoque regional y multilateral para abordar la migración venezolana.

No obstante, el Plan Regional de Respuesta para Refugiados y Migrantes de Venezuela ha movilizado sólo el 4% de los 1.400 millones de dólares necesarios para 2020. Eso es sólo 12 dólares por migrante. Es necesario fortalecer la conciencia mundial sobre esta crisis humanitaria.
En el contexto de la pandemia del COVID-19, es necesario que abordemos adecuadamente, hoy más que nunca, las necesidades humanitarias y de desarrollo de los migrantes vulnerables y sus comunidades de acogida.

Colombia está decidida a seguir brindando asistencia a todos los migrantes. Y reiteramos nuestra gratitud, a todos los países y organizaciones que están comprometidos con este esfuerzo colectivo de reconstruir la vida, la esperanza y la dignidad de los migrantes venezolanos.

Muchas gracias.