Intervención de la Canciller Claudia Blum en el Trigésimo octavo período de sesiones de la CEPAL

 

 

Honorable señora Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena;

Ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Costa Rica, Rodolfo Solano;

Señoras y señores Cancilleres;

Distinguidos jefes delegación;

Apreciados participantes: 

Quiero agradecer a la CEPAL por hacer posible este encuentro, y a Costa Rica por la organización y liderazgo de este periodo de sesiones. 

La crisis sanitaria, económica y social ocasionada por el COVID-19 representa el mayor desafío para el mundo desde la Segunda Guerra Mundial.

Según el Fondo Monetario Internacional, nuestra región tendrá la mayor contracción económica del mundo. En América Latina y el Caribe, la CEPAL ha proyectado para 2.020 una caída del 9,1% del PIB. Este año, el PIB per cápita promedio regional caerá a los valores de 2.010, y la pobreza subirá al nivel de 2.006.

Los impactos de la pandemia han frenado nuestro desarrollo como países, y afectan con mayor gravedad a las comunidades más vulnerables.

Apreciados colegas,

El tema que nos convoca hoy permite un valioso intercambio de experiencias y una reflexión sobre caminos innovadores y viables para asegurar una recuperación que promueva la reactivación económica, con visión de igualdad y sostenibilidad.

En Colombia, el Plan Nacional de Desarrollo 2018-2022 fijó como objetivo central la construcción de equidad.  Este Plan establece una política social moderna para asegurar que el progreso económico se traduzca en bienestar y oportunidades reales para todos.  La crisis actual nos ha confirmado la importancia de este camino que nos hemos trazado, en el que hemos logrado significativos avances.

 

En el marco de la pandemia, el Gobierno del presidente Iván Duque lanzó un plan de reactivación en línea con los objetivos de sostenibilidad y equidad. Los ejes de esta estrategia llamada Compromiso por Colombia son: bienestar para los más pobres y vulnerables, generación de empleo, crecimiento limpio, desarrollo rural, y paz con legalidad.

En materia de apoyo a hogares vulnerables que vieron reducido su ingreso vital, quiero compartir algunas iniciativas de impacto social.

Fortalecimos el programa Familias en Acción, que abarca a 2,6 millones de hogares que reciben transferencias en efectivo condicionadas a requisitos de educación y salud para los niños.

Así mismo, ampliamos dos programas: Jóvenes en Acción, que respalda económicamente a 290 mil estudiantes; y Colombia Mayor, que beneficia a 1,6 millones de adultos retirados que no gozan de pensión. 

Se creó la iniciativa Ingreso Solidario, para apoyar con giros periódicos a 2,9 millones de hogares de bajos ingresos, NO cubiertos por los anteriores programas. Esta estrategia seguirá hasta junio de 2.021.

Las acciones de apoyo directo a los sectores desprotegidos son esenciales en países como los nuestros, donde tenemos grandes retos en materia de pobreza e informalidad económica.

En la reactivación del empleo, se han aprobado inversiones en proyectos estratégicos. Y otorgamos prioridad a la política de emprendimiento que enfatiza en la micro, pequeña y mediana empresa, que ofrecen oportunidades para la formalidad y la equidad.

Así mismo, durante la crisis sanitaria cobró relevancia la transformación y conectividad digital en la que hemos avanzado en todo el país.  Llegamos a 10 mil centros rurales con internet gratis las 24 horas, lo que garantiza el acceso a la educación por medios digitales incluso en períodos de distanciamiento social.

Implementamos además servicios de atención médica por medios tecnológicos. Y las modalidades de tele-trabajo, comercio digital y servicios virtuales han cobrado preponderancia en la economía. Es esencial consolidar el acceso a estas tecnologías para todos los sectores, por razones de equidad, y porque estos avances fortalecen la productividad y competitividad hacia el futuro.

Señoras y señores,

La pandemia nos ha mostrado la estrecha relación entre la salud de los ecosistemas y la salud humana.  Y la necesidad de transformar los patrones actuales de producción y consumo por unos que sean sostenibles.   Por eso, es fundamental que nuestros planes de reactivación se encuentren alineados con los objetivos ambientales.

En Colombia, hemos priorizado 27 proyectos estratégicos de energías renovables y de transmisión que promueven la sostenibilidad, al tiempo que generarán 55.000 empleos.

Así mismo, adoptamos la Estrategia Nacional de Economía Circular y lideramos la Coalición Regional de Economía Circular, del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Esperamos trabajar con toda la región y con el sector privado para la transformación hacia una economía que aproveche la energía y los recursos, incluidas las materias primas, los productos y los residuos de la mejor manera, y evitar así impactos negativos en el medio ambiente.

Reafirmamos nuestro compromiso con el Acuerdo de París.  A pesar de que el Foro Económico Mundial estima una reducción en las emisiones de efecto invernadero del 7% en 2.020, estos impactos son transitorios. Este año actualizaremos la Contribución Nacionalmente Determinada de Colombia, y estamos avanzando en la formulación de la estrategia para alcanzar la carbono-neutralidad al 2.050.

De otro lado, trabajamos sin pausa para impulsar negociaciones sobre el nuevo marco global del Convenio sobre la Diversidad Biológica, que constituye una oportunidad única para la región y para el planeta.

Apreciados Ministros:

En esta pandemia, Colombia hace un llamado a los países y sectores sociales de nuestra región a actuar comprometidos y de manera inmediata para retomar el camino del desarrollo sostenible. La Agenda 2030 se reafirma como nuestra hoja de ruta colectiva para eliminar la pobreza, reducir las desigualdades, promover el bienestar y enfrentar la crisis ambiental, sin dejar a nadie atrás.

Los países de América Latina y el Caribe hemos vivido y superado a lo largo de la historia emergencias y desafíos complejos. Las lecciones aprendidas como región nos enseñan que el multilateralismo y la cooperación internacional son caminos esenciales para alcanzar los objetivos comunes.

El propósito de reactivar nuestras economías, con igualdad y sostenibilidad, nos exige una acción colectiva a gran escala, a través de cooperación política, económica, social y científica entre los Estados, así como alianzas público-privadas. Solo de esta manera vamos a recuperar el camino hacia sociedades más prósperas, saludables, equitativas y pacíficas.

Muchas gracias