Bogotá (nov. 9/16). El Viceministro de Asuntos Multilaterales de la Cancillería, Francisco Javier Echeverri, participó en el acto formal de entrega de restos mortales de la señora Luz Mary Portela León, víctima directa de los hechos del Palacio de Justicia ocurridos en 1985.
Este acto de entrega de los restos se dio en cumplimiento de una de las órdenes dictadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos, en el Caso Rodríguez Vera y Otros (Desaparecidos del Palacio de Justicia) Vs. Colombia.
Durante el evento, el Viceministro de Asuntos Multilaterales manifestó que es imprescindible la recuperación de la verdad en las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas en Colombia, ya que sin esta es imposible superar el duelo causado por las acciones violentas de los diferentes actores del Conflicto armado.
“Vivimos hoy un momento histórico para el país. El camino hacia la reconciliación y la paz se abre como una realidad ante nosotros, brindándonos quizá la oportunidad más importante de nuestras vidas: construir un nuevo país donde quepamos todos, un país sin intolerancia, un país sin indiferencia. En suma, un país donde se valore la vida humana”, expresó el Viceministro Echeverri.
La ceremonia estuvo presidida por la Fiscal del Caso, Jenny Claudia Almeida y familiares de las víctimas de los 11 desaparecidos y sus representantes. El acto fue seguido por un homenaje a los padres y madres de los desaparecidos hasta el Colegio Mayor San Bartolomé, lugar en el cual se celebró una ceremonia religiosa y la posterior inhumación de los restos.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, a través del Grupo de seguimiento a Órdenes y Recomendaciones de Órganos Internacionales en Derechos Humanos de la Dirección de Derechos Humanos y DIH, coordina el cumplimiento de las decisiones internacionales proferidas por el Tribunal Interamericano, a través de una gestión interinstitucional, con las víctimas y sus representantes.
Con este acto, el Estado honra no solo a todos los colombianos víctimas de desaparición forzada, sino que avanza un paso más en el acatamiento de sus compromisos adquiridos en el ámbito internacional, con la convicción de garantizar los derechos de las víctimas y sus familiares a la verdad, la justicia y la reparación.
