Cartagena, (oct. 28 / 16).  Así lo aseguró su Majestad el Rey de España Felipe VI al señalar, durante la clausura del XI Encuentro Empresarial Iberoamericano, que se abordaron cuestiones claves para la región: “Tras varios años de dificultades económicas, las expectativas mejoran en Iberoamérica, y a ello contribuyen el reforzamiento de los intercambios comerciales y en la inversión a nivel regional y global”.

Según el Rey Felipe VI, “las compañías innovadoras e internacionalizadas – que cuentan con capital humano cualificado y estable, y con capacidades y metodología de alta calidad- son más resistentes a las adversidades”; por lo que “la diversidad geográfica ha desempañado una función determinante para afrontar con los efectos adversos de la crisis”.

Por consiguiente, según Don Felipe, “en el proceso de diversificación geográfica, el área de América Latina y el Caribe representa una prioridad como mercado de destino a nivel global, y muy especialmente, para las empresas españolas”.

Uno de los retos, en la región, como lo expuso el Rey Felipe VI, “se refiere a la juventud y a su formación. El mercado laboral al que legítimamente deben acceder nuestros jóvenes es cada vez más complejo y competitivo como resultado de la globalización y el impacto de las nuevas tecnologías”.

Los altos niveles de desempleo – en particular entre los jóvenes – que registran actualmente en muchas de nuestras naciones representan una verdadera lacra para nuestras sociedades y un reto que debemos resolver entre todos. El apoyo desde las instituciones públicas y privadas se pueda ofrecer para la mejor formación de capital humano redundará, sin duda, en nuevas oportunidades de empleo, creación de puestos de trabajo y, en definitiva, en crecimiento económico y prosperidad.