El Ministerio de Relaciones Exteriores, en nombre del Gobierno Nacional, ratifica que la declaración de persona non grata de un diplomático cubano acreditado en Colombia, corresponde a sus actividades incompatibles con lo previsto en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas.

Colombia rechaza las hipótesis de Cuba frente a esta determinación soberana, aludiendo a un supuesto desvío de atención, pues a diferencia de Cuba, Colombia es un país abierto al escrutinio internacional.

Colombia rechaza el comunicado de la Cancillería de Cuba que pretende desconocer las actividades de su funcionario diplomático en Colombia, y utilizar argumentos que buscan generar divisiones entre los colombianos.